Javi Guerra desequilibra la balanza

El Valladolid consiguió ganar el partido y llevarse una renta de un gol para el partido de vuelta que se disputará en el Estadio Martínez Valero, aunque la sensación es que los hombres de Abel Resino dejaron con vida al de José Bordalás, ya que el conjunto ilicitano fue una marioneta en manos de un equipo que supo leer mejor el partido y que sacó de los nervios a los jugadores rivales. La clara imagen de impotencia fue Héctor Verdés, que en menos de quince minutos vio dos amarillas, la segunda por buscar la venganza por la agresión recibida por Javi Guerra.

El primer tiempo comenzó con una gran oportunidad para el Valladolid, pero a puerta vacía Nauzet lanzó muy flojo y Carpio llegó para despejar, a partir de ese momento el Elche intentó dominar el balón y tuvo una oportunidad muy clara, pero el linier lo anuló por fuera de juego cuando se plantaban Kike Mateo y Ángel ante el portero local. El segundo tiempo fue un monólogo del equipo pucelano, Javi Guerra marcó de cabeza, pero tuvo varias para marcar, además los locales reclamaron un penalti sobre Óscar, después el Elche reclamó uno sobre Xumetra.

Así que todo abierto para la vuelta, donde el Elche tendrá que jugar mejor para remontar la eliminatoria.