Seguro que más de uno habrá pensado en el sorprendente líder que podría deparar esta jornada liguera a poco que se dieran un par de resultados que no serían en absoluto disparatados: si el Málaga derrota al Xerez y el Sporting, en casa, hace lo mismo con el Real Murcia, los yogurines de Manolo Preciado serían los primeros de la clase en la novena jornada de liga.
Todavía en plena búsqueda de soluciones económicas, la entidad gijonesa se planteaba esta temporada, de nuevo, como un asentamiento en la categoría a la espera de que la nueva hornada de Mareo vuelva a explotar y unos cuantos «condimentos» de fuera hiciesen el resto. Pero cuando ya hemos superado un tercio de la primera vuelta, los de El Molinón apenas han necesitado de lo segundo para ser el tercer clasificado.
¿Las claves? Muchas: un renacido Congo, la veteranía de hombres como Juanmi o Javi Fuego, la solidez del guardameta Roberto y jóvenes promesas como el ilicitano De Lucas o el ex madridista Barral. Y por supuesto, Preciado, que lo que tiene de buena persona posiblemente también lo tiene de gran entrenador. Y él, que tantas cosas buenas y malas ha pasado en Levante, Murcia y Racing, algo debió de haber visto en este grupo para aceptar la oferta que se le hizo con los ojos cerrados.
Tal vez no se dé la citada carambola esta jornada. O sí, poco importa. Lo cierto es que el Sporting está protagonizando un arranque que pocos imaginaban para un equipo, en principio, diseñado para mantenerse con dignidad. ¿Tendrá suficiente gasolina para llegar hasta el final como ahora?
