Seguimos hablando del Celta y de temas extradeportivos, y es que este equipo parece que le ha sentado muy mal el descenso, porque no se conforma con sufrir en segunda división, sino que están metidos hasta el fondo en problemas, sino es con los jugadores es con los resultados, pero al final no encuentran una estabilidad que la plantilla y el entrenador lo agradezca.
Iriney es el nuevo caso, porque el equipo vigués le renovó automáticamente para tres años, pero el jugador se negaba a renovar, por lo que es un jugador libre, pero ha tenido que ir a la justicia para saber en que situación se encuentra, porque la directiva celtiña afirman que es un empleado del club.
Si consigue la carta de libertad, sumado al pasaporte comunitario que recibe el mes que viene, hace de Iriney un jugador muy apetecible por clubs que tienen fichas libres, ya que se automáticamente se quedará en el paro, por lo que puede fichar sin esperarse al mes de diciembre.
