Cuando el Huesca fichó a Jonay se sabía que era una apuesta arriesgada, que era un delantero muy joven y no se sabía como iba a llevar el peso de un equipo que tenía que necesitar sus goles para conseguir la permanencia, además la afición del Huesca tenía en mente a dos delanteros que la temporada pasada hicieron muchos goles como son Rubén Castro y Roberto, ambos se marcharon por distintas razones, pero la sombra que dejaron era muy grande.
Ahora Jonay vuelve a La Palmas, a su casa, en busca de encontrar la tranquilidad necesaria para «volver a jugar al fútbol», puesto que en estos momentos no se siente con fuerzas, la cabeza se ve que le ha pasado una mala jugada como le pasó a otros grandes jugadores como Reyes o Navas y tiene que volver a «reinvitarse.
Se espera que en un mes pueda volver a jugar con el Huesca, aunque ahora mismo el club no le ha puesto fecha de vuelta, algo que agradece Jonay y espera devolver ese cariño algún día, yo espero que solo sea un baja temporal y para diciembre anuncie su vuelta.