Hace un mes no podía pensar que el partido que se iba a disputar en Vallecas iba a ser un partido descafeinado, de esos que la afición ya no se vuelca y el estadio está medio vacio, porque cuando la lucha por el ascenso ha desaparecido y encima es un sábado por la tarde, donde muchos comercios están llenos y las familias van a comprar, por lo que la espectación va a ser mínima.
Desde los dos equipos están haciendo una llamada a la lucha por el cuarto puesto, que todavía no van a tirar los tres partidos que quedan y que van a pelear por quitarle ese lugar al Hércules, aunque lo peor de todo esto es que no dependen de ellos mismos para alcanzarlo.
Ambos equipos llegan después de perder el encuentro de la semana pasada, por un lado los de Lillo, que por cierto ya sabe que al año siguiente no ocupará ese banquillo, cayeron por 0-2 ante un Córdoba, que también estaba necesitado de puntos, mientras que el Rayo Vallecano acumula dos encuentros perdiendo, el primero ante el Elche en su casa y el segundo ante el Levante, seis puntos que le han quitado toda opción de ascenso.
¿Se verá buen encuentro en Vallecas?