Luego de una temporada complicada, en la que el Valladolid finalmente terminaría en el tercer puesto de la clasificación por debajo de los ascendidos directamente Deportivo La Coruña y Celta de Vigo, los pucelanos se terminaron haciendo con su propio puesto en la Liga BBVA luego de haber derrotado al Alcorcón en la final de los playoffs por 2 a 1 en el resultado global.
Luego de asegurarse el resultado, más de 30.000 personas se dieron cita este domingo en la Plaza Mayor de Valladolid, la mayoría de ellas adornadas con bufandas, banderas y una gran cantidad de elementos que sostenían una leyenda corta, pero que servía para resumir lo más profundo que sentían en su ser: “somos de Primera”.
De la misma forma los futbolistas aparecieron en el centro de la ciudad, montados en el clásico autobús que los lleva a recorrer todos los sitios donde se han agolpado los hinchas, y llegaron curiosamente acompañados de por el cantante King África y el joven Antonio Aragoneses, confinado a una silla de ruedas desde el anterior ascenso del Valladolid a Primera, hace cinco años, y que se ha convertido en una suerte de amuleto del club.
También la ceremonia sirvió a los fanáticos para hacerle saber a muchos de los futbolistas lo apreciado que son, y manifestarles su intención de que permanezcan en la institución de cara a la próxima temporada, especialmente en los casos de Sisi, Manucho y Jaime, sin olvidar a otros como Nauzet o el goleador de la final, Javi Guerra.
Además, el club aprovechó la situación para vender una gran cantidad de camisetas con leyendas alusivas al ascenso logrado por el Valladolid, mientras que muchos de los principales funcionarios locales, como el regidor, Francisco Javier León de la Riva, se hicieron presentes para mostrar su apoyo a los futbolistas.
