Si hay un equipo que no contaba para estar luchando por el ascenso a estas alturas, ese es el Elche, porque comenzó la temporada de forma horrible, de hecho era colista con tres o cuatro puntos en la jornada 7 de liga, pero el cambio de entrenador, se marchó Claudio Barragán y llegó Pepe Bordalás, dio un cambio total a la imagen de un equipo que el invitado de lujo y que sigue soñando, a pesar que las lesiones en jugadores claves como Santos no le han respetado.
El Elche está ahí por méritos propios y por un ataque que se a vuelto letal, y es que es el equipo más realizador de la categoría y tiene en sus filas a Jorge Molina, el pichichi que aventaja en tres goles a Stuani del Albacete y Toché del Cartagena, además jugadores como Usero, Juli, Perera o Saúl se han convertido en goleadores cuando el «grande» falla.
El conjunto de Pepe Bordalás juega con un arma de doble filo, por un lado no tiene presión por el ascenso, su objetivo está cumplido hace semanas y no era otro que la permanencia, y al mismo tiempo esa relajación, puede ser muy mala para algunos partidos que el rival se juega más, como es el caso de esta semana ante el Cádiz.
Estos son los partidos que le quedan al Elche esta temporada:
Cádiz (Jornada 36. Fuera de casa=
Celta (Jornada 37. Casa)
Girona (Jornada 38. Casa)
Las Palmas (Jornada 39- Fuera de casa)
Murcia (Jornada 40. Casa)
Nástic (Jornada 41. Fuera de casa)
Real Sociedad (Jornada 42. Casa) Este partido puede ser muy bonito para dos aficiones que pueden ser de primera división la temporada que viene.