Más vale tarde que nunca, o eso es lo que piensan los aficionados del Alavés, aunque tuvieron que pasar un susto para que el club y el Ayuntamiento se pusieran manos a la obra para cambiar la estructura del estadio, para que tuviera más seguridad.
En el día de hoy comenzarán unas obras que tendrán la supervisión del Ayuntamiento y del propio club, aunque todavía no se pondrá a fondo los trabajodores con el fin de afectar lo menos posible al equipo.
Todavía quedan por instalar las redes que protejan los fosos y hay que decidir a qué altura se anclan. Y el principal de los asuntos es saber quién se hace cargo de los costes económicos de todas estas mejoras que se harán en el estadio.