El ex-portero del Celta de Vigo llegó con ganas de demostrarle a Eusebio que se había equivocado en la decisión que tomó este verano, cuando prefirió a otros porteros antes que a él, por eso estaba revolucionado, estaba más nervioso de lo normal, o por lo menos eso escuché en la radio, y es que se encaró con jugadores como Aaron Ñinguez entre otros.
En el túnel de vestuario hubo una de esas peleas que se llaman callejeras, puesto que jugadores del Celta y Albacete, sumado a los cuerpos técnicos se vieron en un incidente de esos que se prefiere olvidar, porque según dice el acta del árbitro Catalá, jugador del Celta y el portero Notario se engancharon a puñetazos, hasta el punto que éste último presentó un parte médico que decía que presentaba un hematoma en la cara.
El Celta asegura que no fue Catalá el culpable de todo esto, pero lo que está claro que los jugadores implicados tendráin que tener una buena sanción, porque como dice Roberto Lago «Utilizar la violencia para solucionar las cosas es impensable», y ahora hay que esperar la sanción.
