Pocas veces se ve un partido con tantos goles, porque si ya es raro que el conjunto local consiga remontar un 0-2, más raro es que el visitante le de la vuelta a un 3-2, al final los locales, en el tiempo de descuento empataron a cuatro haciendo justicia al espectáculo que se a visto sobre el estadio de Vallecas.
En el primer tiempo el Hércules fue mucho mejor que el Rayo Vallecano, a pesar de adelantarse con una jugada ensañada y gol de Rodríguez, los de Esteban Vigo no se echaron hacía atrás, incluso el 0-2 estaba más cerca, por eso Pepe Mel, ni corto ni perezoso, decidió cambiar a un jugador para meter a Piti, la apuesta salió bien y estuvo cerca de marcar, pero Calatayud demostró porque era el portero menos goleado.
El segundo tiempo se esperaba a un Rayo muy agresivo, y lo que se encontró fue con un penalti en contra, en esta ocasión Farinós no perdonó y puso más distancias en el marcador, pero el equipo de Pepe Mel tiró de casta y pocos minutos después Piti volvía a levantar las esperanzas de remontada, y más Míchel provocó el penalti que David Aganzo transformó, pero antes de saborear el empate, llegó el tercero de los locales, otra vez Aganzo, esta vez de cabeza, batía a un sorprendido Calatayud.
Parecía que el partido iba a acabar con ese marcador, pero el defensa Cuadrado, que fue quien cometió el penalti sobre Tiago Gomes, se metió un gol en propia puerta que ponía el empate en el marcador, pero poco después Delibasic marcaba el 3-4, un gol que valió su peso en oro, hasta que en la última jugada del partido Coke metía la cabeza y el porter del Hércules no podía hacer nada.
Así que gran partido en Vallecas con goles y espectáculo, aunque el empate le sabe a poco a los dos equipos.