Ayer fue un día de no leer la prensa ni escuchar la radio, y por eso me quedé más que sorprendido cuando en el encuentro que fui a ver, me dijero que el partido que se iba a disputar entre el Murcia y el Celta en la Nueva Condomina se había suspendido, y la razón era porque 13 jugadores se habían intoxicado con la cena de despedida de Javier Clemente.
Este comentario hizo que por mi cabeza me vienese la palabra venganza, ya que el técnico de Barakaldo quería demostrar que sin él también pierden, aunque es algo muy cruel, entre otras cosas porque hay jugadores que lo han pasado mal, además si eso fuera cierto usaría algo más «discreto» para que no se viera la mano negra.
Está claro que Javier Clemente no ha dejado una buena huella en el club, ni en muchos jugadores, pero encima ha tenido la desgracia de irse por la «puerta grande», ya que esto se va a quedar como anécdota en esta liga.
Ahora bien, ¿habrá sido premeditado?¿los jugadores han usado mucho alcohol para celebrar la despedida?¿una casualidad?¿qué opináis?