Según ha anunciado en las últimas horas el Consejo de Administración del Gimnàstic de Tarragona, se ha decidido de forma unánime dar por finalizado el vínculo contractual que el club mantenía con el delantero de origen holandés Berry Powel, debido a los actos de indisciplina recientes, uno de los cuales agravó una lesión que ya sufría y que lo mantendrá fuera de los terrenos de juego hasta final de temporada.
De tal modo, el Nástic ha explicado a través de su página web que “el comportamiento del jugador no es el correcto según el club y, por lo tanto, se llega a la decisión de rescindir el contrato. Estamos en contacto con él y pronto se cerrará definitivamente su desvinculación”.
El conjunto de Tarragona acusa al futbolista de haber salido a una discoteca, donde se resintió de una dolencia física que mantenía. Igualmente, en un principio el propio Powel salió a defenderse, manifestando que en su consideración, aunque el comportamiento mantenido va en contra de las normas de la institución, no fue causante éste de la lesión que sufre en la actualidad.
De todas formas, y aunque se ha filtrado que el Nástic posee sobre la mesa nombres para poder suplir la baja forzada de Berry Powel, se ha descartado de momento que el equipo vaya a incorporar a algún otro futbolista, ya que según se informa, “existe una total confianza en los jugadores ofensivos que integran la plantilla”.
Más allá de esta noticia triste para el futbolista de 31 años, los directivos han manifestado que las puertas del club están abiertas en caso de que Powel decida recuperarse de su lesión en las instalaciones del Gimnàstic durante los próximos meses. Debe recordarse, finalmente, que en temporada y media con la camiseta grana, el nacido en Utrecht anotó 20 goles con los españoles.
