Francisco Joaquín Pérez Rufete ha sido presentado como el último fichaje del Hércules, a la espera que gente como Abel Aguilar consiga salir del Udinense para fichar por el club alicantino, pero mientras tanto la afición está contenta por tener a un jugador que todavía puede dar tardes de gloria y ayudar al equipo a conseguir el objetivo de esta temporada, que no es otro que el ascenso a la máxima categoría.
Hablar de Rufete es definirlo como un trabajador, un todoterreno de la banda, puede jugar con las dos, y que trabaja mucho para el equipo, el problema que le veo es que tiene partidos muy intermitentes y no termina de ser regular, pero en segunda división puede ser un valuarte para el Hércules, y más cuando tiene al lado gente como Tote que puede conectar perfectamente en el centro del campo.
El jugador nacido en Benejúzar , un pueblo de Alicante, vuelve a la provincia después de haber militado en equipos como Málaga, Valencia y Español, en este último jugó su última temporada, pero no contó con todo los minutos que esperaba, además no sé si está tan en forma para aguantar el nivel de la primera división.
