Wakaso Mubarak es un jugador con mucha calidad, pero tiene un problema, y muy grave, porque cuando va a por el balón, le da igual si se lleva al jugador o no, y sus entradas suelen ser temibles, hasta el punto que ve muchas amarillas, y alguna roja.
El centrocampista ghanés parecía que se había enseñado a controlar su temperamento, al principio de temporada se convirtió en un jugador imprescindible, pero en las últimas semanas ha vuelto a las andadas, hasta el punto que en el partido ante el Granada fue expulsado a la media hora, y antes, Pino Zamorano le pudo expulsar por una entrada temible.
El entrenador Pepe Bordalás se ha cansado de la actitud que tiene Wakaso en el campo, y veremos cuando lo vuelve a poner, pero es que el ghanés no aprende, y eso que el club le sancionó económicamente esta temporada por la expulsión tonta que vio ante el Xerez.
Es una pena que un jugador que tiene entrega y trabajo, incluso en algunos momentos muestra algo de calidad, aunque se «emociona» e intenta hacer cosas extrañas que no sabe, sea noticia por las entradas y las expulsiones que ve a lo largo de la temporada. Así que el club ilicitano espera que con la nueva sanción y los partidos que Bordalás le deje en el banquillo, sirva para que aprenda y no repita estas acciones.