Como si toda la polémica en torno a la fecha en la que debía recuperarse el encuentro suspendido entre el Cartagena y el Celta de Vigo no hubiera sido suficiente, en las últimas horas se ha confirmado que Alfonso Pino Zamorano, del Comité Castellano-Manchego, será el encargado de hacerse cargo de este choque correspondiente a la trigésima tercera jornada de Segunda, que tuvo que suspender él mismo cuando uno de sus asistentes recibió el impacto de un objeto en la cabeza.
Vale recordar en este sentido que aquel compromiso, suspendido el pasado día 7 de abril en el minuto 59, se reanudará el 8 de mayo a puerta cerrada en el estadio Cartagonova a las 21.30 horas, aunque el Valladolid había insistido en la necesidad de que el mismo concluyera una semana antes para evitar que Celta salga favorecido, algo que los gallegos desestimaban en cualquier caso.
Otra de las cuestiones a tener en cuenta es que en esta reanudación, Pino Zamorano estará auxiliado en las bandas por Raúl Escuderos Sánchez, del Colegio Castellano-Manchego, y por Francisco Javier Vázquez Fernández, del Tinerfeño, quien justamente será el encargado de reemplazar a César David Escribano Pérez, el juez que recibió el impacto
En aquel entonces, Pino Zamorano decidió parar el partido en el momento en el que Escribano Pérez recibió en la cabeza un leve impacto de un objeto lanzado desde la grada. Dicho objeto, que no fue identificado, le causó una pequeña erosión de menos de un centímetro sin inflamación, según el parte médico facilitado minutos después por los propios especialistas del Cartagena.
Posteriormente, y aunque en un principio se había decidido que el compromiso finalizaría el día 1 de Mayo, la Real Federación Española de Fútbol decidió que fuera finalmente el 8 del mismo mes el escogido para concluir con el choque. Al mismo tiempo, se determinó que el Cartagena sería multado con 6.000 euros, debería hacerse cargo de todos los gastos de traslado del Celta y de los árbitros del compromiso, y su estado sería apercibido de cierre.